Desde hace años tenemos los precios del suelo y por lo tanto de la vivienda disparados. De este hecho conocido, hay muchas razones incluidas las políticas, pero no voy a entrar en esta ocasión a comentarlo. Tan sólo vuelvo a recordar a quien me quiera escuchar, que las parcelas, los terrenos rústicos no son hipotecables, al no poder edificar sobre ellos ninguna vivienda, (tan sólo una casa de aperos de máximo 30 m²). Por lo tanto tienen un valor infinitamente menor.
No creamos que estamos comprando una ganga. Tengamos claro que es lo que compramos y aunque veamos alrededor muchas construidas, podría darse el caso, que el Ayuntamiento de turno, nos obligara a demoler nuestra vivienda.